Jacqueline: el destino cambia muchas cosas pero a la gente de la Mueble no la olvido
Por Jacqueline Durán Barrios
— En 1985, siendo una joven de 18 años entré a realizar mis prácticas escolares de Comercio en la Mueblería del Pueblo junto con mi compañera Gricelda Cervantes, al terminar el período requerido, me quedé a trabajar pues al mismo tiempo acabé la escuela.
Ubicada en Avenida Zarco 4201, Col. Zarco, en Chihuahua, Chih. la “Mueble” fue para muchos una experiencia totalmente inigualable, conocer y trabajar con gente de la que aprendes y convives de manera emocionalmente familiar…. Me llena de júbilo, fue una fortuna conocer a Humberto Lozano (el flaco), Kuata Pérez, Lety Castillo, por nombrar algunos…
En octubre del mismo año nació mi hija Melissa, a quien no dudé que la bautizaran todos mis compañeros y amigos de la Mueblería, dicho bautizo se realizó en el siguiente diciembre junto con la posada de navidad, en el mismo taller de carpintería…. Wow! Ese taller, también se convirtió en salón de eventos ya que, platico con enorme gusto que también celebramos ahí la fiesta de mi boda con Jorge Rodríguez. Y así, hubo otras bodas como la de Fernis con Mari, Rey con Paty. Otros bautizos y cumpleaños. Fuimos viendo nacer algunos de los hijos de todos.
El trabajo en la Mueble era pasión, dividida por sus áreas como: Carpintería, Pintura, Acabados, Administración, Contabilidad, Ventas y Reparto; en lo particular estuve asignada como Auxiliar Contable, todos teníamos la oportunidad de combinar el trabajo con la amistad, pues así como destinábamos un horario de labores, también dedicábamos como tradición el festejo navideño, y “un día de campo” al año (por lo general el 1º. De mayo), acompañados de nuestras familias, esto permitía conocernos y formar una familia grande, compartíamos comida, sonrisas y el cariño que siempre se reflejó.
Cada mes, al término de la jornada, se realizaba una junta general para tratar los asuntos de “la mueble” ya fuese alguna problemática, finanzas, plan para incrementar las ventas, reflejo de ganancias, etc. Siempre acompañándonos de un cafecito y galletas. Todos participábamos y para tomar una decisión se contaba con el voto de la mayoría; fue así como se determinó que los más recientes ganáramos igual que los demás, después de haber pasado un tiempo de prueba….
En la colonia Lealtad se encontraba un grupo de compañeros haciendo equipo de trabajo con la Mueble en cuanto a herrería y tapicería, complementando la variedad de muebles al público.
Las mejores temporadas de venta por lo general, se veían en diciembre… pero lo mejor era el caluroso abrazo de todos deseándonos una feliz navidad, un abrazo que jamás se olvida cuando viene de gente tan querida, si éramos 30, eran 30 abrazos cargados de energía positiva y de cariño.
Como en todas partes, llegaban tiempos malos y aunque no hubiera suficiente venta para cobrar nuestros salarios, había suficiente fuerza para salir adelante…
En los buenos tiempos se contaba con un área de comedor, siendo nuestro horario de trabajo de 9 a 1 y de 3 a 7 aprovechábamos para comer ahí y cuando llegaba la hora, éramos como niños compartiendo un momento sagrado, además de vacilar y reír tan relajados. No olvido tan exquisitas comidas preparadas por diferentes personas, a veces por una señora destinada y a veces por nosotros mismos cuando no contábamos con alguien; después de comer, los más deportistas se ponían a jugar futbol en la calle No. 42, una privada pequeña y otros éramos los espectadores, al dar las 3 continuábamos con nuestras labores.
Hubo muchas anécdotas y siempre cargadas de risa, permanecí ahí hasta 1993. Hoy, extraño esos tiempos y a la gente con la que tan feliz estuve trabajando, cuando se ha podido, se ha convocado a una reunión anual en la que nos hemos juntado a recordar esos años maravillosos, y aunque algunos han partido, siguen en nuestro corazón.
El destino cambia muchas cosas pero a la gente de la Mueble, no la olvido
Con cariño, Jacqueline
Chihuahua, Chih., Agosto 31 de 2020.
Adolfo Decanini Medina (Chip)
Aída
Andrés Rivas
Arturo González (Foco)
Cruz Hernández (Banana)
Fernando Sierra
Francisco Romero
Guadalupe Márquez
Hori Albán Armenta Márquez
Humberto Javier Lozano Martínez (el Flaco)
Ismael Sustaita Montes (el Mono)
José Luis Gonzalez (Pere)
José Reydecel Calderón Ochoa
Juan Angel Cruz Elorreaga
Julia Miranda
Leonel Carrillo
Leticia Castillo Márquez
Loreley Servín
Lorenzo Hernández Sifuentes
Manuel Sifuentes
María Jacqueline Durán Barrios
María Luisa Pérez Martínez (la Kuata)
Mario Decanini Medina
Martín Sierra Jácquez
Monserrat Domínguez González (Chacho)
Oscar Jaime Vázquez Alemán (Liebre)
Prisciliano Domínguez González
Rafael Iván Gastelum (Víctor)
Reynaldo Padilla Lara (Mateo)
Rosa del Carmen Contreras Colomo
Ruperto Anchondo
Sabino Medrano Villa
Sandra Romero
Socorro Márquez Tomasita